Año tras año, durante la Velá de Santiago y Santa Ana es habitual ver como desde algunas casetas cuelgan banderas reivindicativas hacia el río, ya sea tricolor o rojigualda. Una ‘guerra de emblemas’ que este año no se producirá.
No en vano, el Ayuntamiento de Sevilla ha incluido en el proyecto de ordenanza para la Velá trianera la prohibición de colocar banderas de cualquier tamaño, lonas, toallas o similares que partan desde la trasera de la caseta hasta el río, penalizando la desobediencia con multas de hasta 1.500 euros. Así se ha decidido obedeciendo a una «histórica demanda vecinal», en un escrito en el que también se regula cómo hay que solicitar las casetas, su titularidad, el montaje y la organización, el funcionamiento de la propia Velá, el Pregón con el que arranca la fiesta y la venta ambulante en el recinto.
En este sentido, según informa Diario de Sevilla, habrá un mínimo de 19 casetas que serán cedidas por el Consistorio hispalense dependiendo de «su representatividad y el grado de interés o utilidad de sus fines». Además, se unificará la música con un hilo musical aportado por el Distrito, por lo que se «prohíbe la música propia o los grupos musicales».
En cuanto al montaje y desmontaje, será supervisado por el Distrito, mientras que las pañoletas deberán ser «una pintura de motivos barrocos tradicionales de Triana sobre fondo blanco, llevando integrado el título o anagrama que defina a los titulares de la cesión administrativa, de una forma discreta y sin distorsionar la base», debiendo ser el primer boceto aprobado por la comisión organizadora.
Por último, conn respecto a la venta ambulante se aprueba la distribución de «productor tradicionales» -avellanas verdes, higos chumbos, flores…-, quedando prohibida la venta de «objetos ruidosos o molestos».
R.T.
